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!Qué gran negocio hubiera hecho el Santo vendiendo su arte como si de una start up se tratara¡ ¿te imaginas poder contar con el widget «profetic» en tu smartphone?
Mis selectísimos seguidores conocerán de sobra la historia de San Malaquías, y no seré yo quien se lo repita.
Pero no puedo por menos que imaginarme a Malaquías en su Abadía de Bangor , dedicado a la investigación del futuro,con la ayuda de su don profético, y marchando a Roma para presentar su producto final:las Profecias.Buscando lobbistas de reconcocido prestigio, como el mismo San Bernardo para introducir una línea estratégica de negocio.
La historia cuenta que murió en Roma en brazos de San Bernardo.
Yo que Pedro Romano estaría muy atento a los lobbys y a los start up.